Transmisión
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Dado que las transmisiones tienen la función de convertir la potencia de un motor en energía útil, el líquido de transmisión mantiene todas las piezas frías, limpias y lubricadas durante el proceso. No espere a notar síntomas de problemas en la transmisión para comprobar el líquido. Lo más probable es que ya se hayan producido daños en ella, como cambios bruscos o deslizamientos, y debería echarle un vistazo un mecánico.
Los niveles de líquido de transmisión deben comprobarse en cada cambio de aceite. Si el nivel es bajo, significa que la transmisión tiene una fuga, ya que el líquido no se consume durante el funcionamiento.
Cómo comprobar el líquido de la transmisión automática:
- Para comprobar la transmisión, el vehículo debe estar aparcado en un terreno llano con el motor en marcha.
- El asa de la varilla de la transmisión será de color rojo en la mayoría de los coches modernos.
- Saque la varilla y límpiela con una toalla de papel.
- Vuelva a colocar la varilla en su tubo y sáquela del todo para hacer una lectura precisa del nivel de líquido.
Cómo comprobar el líquido de la transmisión manual:
- Busque dos tapones roscados en el lateral de la transmisión. El de arriba es el orificio de llenado y el de abajo el de vaciado.
- Afloje el tapón del orificio de llenado y retírelo lentamente.
- Debería poder ver el líquido en el fondo del orificio de llenado. Si no puede, vuelva a enroscar el tapón y apriételo según las especificaciones del fabricante.
- Si el líquido está bajo, la transmisión probablemente tiene una fuga. Llénalo con la cantidad adecuada de líquido y apriete el tapón según las especificaciones del fabricante. Y lleve el vehículo a un mecánico para que le dé su opinión.